Kino ha decidido ser sincero con Jessica, pero la estrategia no le ha salido nada bien. A Jessica no le ha gustado mucho que la llamara “tía” y mucho menos saber que le confesara que físicamente le hubiera gustado más la otra chica. En ese momento, su actitud ha cambiado y le ha dejado claro a Kino que ni como amigos ni como nada, no quería tener una nueva cita con él.