El único día del año en el que El Príncipe se llena de seguidores del cristianismo es el del traslado del Cristo de Medinaceli. Ana Terradillos ha hablado con una ceutí que ha contado cómo se siente al pasar este día en un barrio conflictivo: "Nos sentimos mejor acompañados de la policía porque, a veces, los críos nos tieran piedras o cosas que hacen ruido. A lo mejor no quieren hacer daño, pero el susto te lo llevas".
