‘Madres’ cuenta varias historias de instinto, de cuidados, de superación y de supervivencia. La sororidad y la esperanza dan un respiro a la situación límite que viven sus protagonistas, un grupo de mujeres muy diferentes unidas por las enfermedades de sus hijos, ingresados en el hospital, que se esfuerzan por no perder su identidad mientras su papel como madres se convierte la razón de su existencia.
La primera temporada de la serie ‘Madres, amor y vida’, producida por Mediterráneo, se estrena en Amazon Prime Video el próximo 8 de mayo.
Su nivel de autoexigencia hace que su entorno piense que es prácticamente perfecta, pero está llena de debilidades, aunque su fortaleza le ayude a seguir luchando por aquello que más le importa. Vivía muy volcada en su trabajo, pero cuando su hija Elsa cayó en la anorexia todo su mundo, su familia y sus prioridades comenzaron a desmoronarse. Es conciliadora y gusta tener el control de la situación.
Vivía en su pueblo, con su marido y su hijo, siguiendo una rutina que la hacía feliz, pero el accidente de moto que dejó a su hijo Andy sumido en un coma cambió su perspectiva. Su vida en Madrid le descubrió una nueva realidad en la que ella misma había cambiado, convirtiéndose en una mujer independiente y con ganas de vivir nuevas experiencias. Muy divertida y llena de ternura, es la que pone el punto de optimismo en el grupo de madres.
Es una ejecutiva pudiente, con un puesto muy exigente, dueña de su propia empresa, que siempre ha llenado a su hija de caprichos, pensando que la estaba cuidando pero, en realidad, pagaba a otros para que se ocupasen de su educación y entretenimiento. Cuando ingresan a Duna se da cuenta de que no ha estado a su lado todo lo que pensaba y sus prioridades cambian por completo, aunque le cuesta mucho salir de la fase de negación: no asume que hay cosas que no se solucionan con dinero.
Su sueño es convertirse en madre y por eso vive su embarazo como la mayor ilusión de su vida. Pero su estado pone en riesgo su delicado estado de salud, aunque para ella no hay nada tan importante como poder abrazar a su hija, y hará todo lo posible por que la gestación siga adelante.
Es la madre de Simón, pero también es la abuela de Sergio, un niño autista que pasa largas temporadas en el hospital. Se ocupa de cuidar del pequeño, a pesar de la dureza de la situación. A menudo se convierte en la consejera del resto de madres y siempre aporta esa parte de realismo en los momentos más complicados. Es la voz de la experiencia.