La actuación de Toñi: ‘ No dudaría’
Rosario no ha tardado en darse la vuelta al escuchar la canción y la voz de Toñi. No ha sido hasta que la ha visto cuando ha reconocido a la nieta de Raimundo Amador. Bisbal bromeaba con Manuel Carrasco al tener claro que la pequeña iba a elegir a Rosario: “ ¿Nos damos la vuelta, no?”.
Rosario, de Toñi: “A ella le sobra arte por los cuatro costados de la sangre que lleva”
Nada más terminar la actuación, los tres se han levantado para aplaudir y corear un “¡Qué bonito!”, a lo que Bisbal añadía un “hemos hecho bien”. Rosario les explicaba que Toñi es la nieta de Raimundo Amador, y una ‘mounstra’ de las de verdad: “Toñi me ha cantado a mí en un chiringuito ‘No duraría’ y casi me rompo la camisa. La invité a cantar conmigo. Os lo juro que yo no sabía que estaba aquí”. Manuel Carrasco se dirigía a Toñi para decirle lo precioso que canta y la luz que tiene: “Qué alegría darnos la vuelta con voces como la tuya. Tienes mucha luz, iluminas. Cantas precioso”.
Toñi: “Me siento muy feliz. Esta experiencia es lo mejor que me ha pasado en mi vida”
Jesús Vázquez le decía a Toñi que se ha ido por la puerta grande: los tres ‘ coach’ se han dado la vuelta. La nieta de Raimundo Amador ha elegido estar en el equipo de Rosario, algo que le ha hecho muchísima ilusión a la artista: “Me ha dado muchísimo gusto darme la vuelta por su arte y no por reconocerla. Voy a disfrutar con ella un montón”.
Toñi. Once años. Sevilla
Toñi es una sevillana de lo más coqueta que se declara fan de la ropa de leopardo y de cuero. Para ella, lo más importante además de cantar, es estar guapa: “ De mayor quiero ser cantante y modelo”. Viene de familia de artistas: su abuelo, a quien ella llama papá gordo, es Raimundo Amador. Él confiesa que no hay bolo que haga y en el que esté ella y no la saque al escenario: “Estoy aquí para apoyarle a ella porque sé que es su ilusión”, le decía a Jesús. Para Toñi, su ‘papa gordo’ es su ídolo, el que más le gusta, y con quien canta y ensaya. Ante el miedo a que los ‘coach’ no se giren, Toñi lo tiene claro: “Si veo que estoy cantando y no se giran no me tengo que poner nerviosa, al revés, tengo que cantar más fuerte y mejor”.