“Me gusta cuidarme”, nos ha contado Rángel. Su pelo es su seña de identidad y confiesa que dedica mucho tiempo a arreglárselo. Define su look como “polifacético, moderno, casual y con toques clásicos” Para el artista, ir cómodo es esencial. Los pendientes son su debilidad, lleva dos, se los puso su padre con diez y doce años. Es muy deportista, el fútbol es su gran pasión. Le encantan los tatuajes, lleva tatuado el nombre de sus hermanos.