¿Qué pasa si aparece la verdadera Paula García?
Tras la tensa conversación que la supuesta Paula García mantuvo con su padre en el capítulo 6 de ‘La verdad’, Sara intenta comprobar que Fernando García no ha cambiado de opinión y le pregunta que qué pasaría si apareciera la verdadera Paula ya que él tiene claro que ella no es su hija.
La pista que une a Paula García con Mijail Baranov
El inspector Sánchez y la inspectora Maíllo del grupo 9 de la policía de Madrid se han desplazado hasta Santander para informar al equipo de Laguna de la relación que existe entre la joven que asegura ser Paula García y Mijail Baranov, el sospechoso de una red de trata de blancas al que disparó el inspector Eguía. El grupo 9 lleva tres años trabajando en la detención de los responsables y una de sus testigos protegidas ha reconocido a Paula García como la joven que asesinó, en defensa propia, a un miembro de la embajada rusa durante un crucero en la Costa del Sol.
Costa sorprende a Eguía y Paula García en la casita de la Maruca
Convencido de que Paula García es la misma persona que mató al embajador ruso en el barco de Baranov, Marcos Eguía lleva a Paula a su casa familiar para intentar que confíe en él y le cuente la verdad sobre su relación con los rusos. Paula le confiesa que mató al embajador en defensa propia porque le estaba ahogando con una correa y Marcos Eguía se deja llevar por la pasión del momento. Algo que Costa temía que sucediera y que por suerte consigue interrumpir con su llegada.
Paula está implicada en un homicidio
Ni las gestiones de la comisaria Laguna ni el poder de Enrique McMahón han podido hacer nada para que Paula García fuera detenida por la policía. El juzgado ha redactado una orden de detención contra Paula por su implicación en la muerte de un embajador ruso y la promesa de Marcos Eguía de protegerla no ha sido suficiente para evitar que se la llevaran al calabozo.
Lidia McMahón empieza a desconfiar de su hija
Al relatar a la policía y a sus padres lo sucedido en el barco de Baranov, Paula asegura que mató al embajador con una botella y en defensa propia porque estaba muerta de miedo. Temía que la tirara al agua y ella no sabe nadar. Unas palabras que hicieron que Lidia McMahón empezara a dudar de la que considera su hija. ¿Se puede olvidar alguien de que sabe nadar o montar en bici?
Llegadas inesperadas, sustos y reencuentros en el próximo capítulo