La Chusa reconoce que le gusta mucho el sexo pero ella no es la única que disfruta de los deseos más carnales en Mirador de Montepinar. Nuestra particular empleada del hogar hace un repaso por los momentos más apasionados que han tenido lugar en el edificio más ajetreado de la televisión: la aventura entre Coque y Berta o el encuentro en un servicio público entre Maite y Héctor son solo algunos ejemplos.