Clarita no está muy contenta con su novio. Desde que Agustín perdió las elecciones presidenciales en Montepinar, ella le trata como si fuera un perdedor: “Me metes demasiada presión, yo con presión no funciono”, le contesta. Y le pide que no le falte el respeto. Agustín se agobia tanto que se va a su habitación y empieza a salir cada vez vestido de una manera: Hagen das, Margaret Astor, Don Simón…