La misma familia que gestiona la Fonda Milagros, la discoteca sin licencia de actividad en Murcia donde han muerto 13 personas, tienen un restaurante con el mismo nombre a pocos kilómetros del local siniestrado y que ha estado funcionando sin licencia desde el año 2015.
Un equipo de reporteros de 'La mirada crítica' se ha desplazado hasta el restaurante, que permanece cerrado desde el día del incendio pero en el que podemos ver que hay movimiento. Allí, nos aseguran que "la familia está muy afectada" y que tenían conocidos y amigos entre las víctimas.
Además, hemos podido hablar con un empresario de la noche murciana, que ha preferido no dar la cara, que nos ha dado muchas claves sobre el proceso de concesiones y el motivo por el que muchos locales de ocio nocturno trabajan sin licencias: "Se sabe que a lo mejor no tienen definitiva porque tardan hasta siete años en concedértela, pero puedes trabajar en cuanto presentes el proyecto. El primer día viene la Policía Local antes de abrir, te dicen que no puedes funcionar, pero que ellos te ponen una denuncia, te abre un expediente. Si tienes suerte, te dan la licencia, que no te la dan... pues sigues años y años pagando impuestos".
Este empresario nos asegura que les dejan trabajar sin licencia: "Pasas las inspecciones y te dejan seguir trabajando mientras conceden la definitiva".
"El Ayuntamiento tenía constancia de que estaba funcionando. El 80% de las salas están en esa situación. Con los provisionales y si pasan algo se lavan las manos, ese es el tema, siguen funcionando así...", nos ha explicado.