Samuel y Tania llevan dos años y medio juntos y participan en ‘La isla de las tentaciones’ para acabar de una vez por todas con los celos y recuperar la confianza. Su andadura en el programa no empezó de la mejor manera, ya que ella le echó en cara a su chico durante la ceremonia en la que conocieron a los solteros y a las solteras que se mojase más y que insistiese en que no iba a caer en la tentación con nadie.
Los compañeros de Samuel le animaron varias veces a que le dijese palabras bonitas a su novia, pero no fue hasta el día siguiente, cuando tuvieron que dar su primera cita a uno de los tentadores, cuando el canario sacó todo lo que llevaba dentro.
Después de que Tania escogiese a su cita, Samuel abrió su corazón y dijo todo lo que sentía: “Quiero que aunque conozca a un chico maduro, siga prefiriendo mis tonterías, mis gracias, mis bromas. Creo que me va a venir bien que haya elegido a un chico guapo por el tema de la seguridad, que quiero que se convierta en algo bueno para ella”.
Al contrario que la noche anterior, en esta ocasión Tania si se mostró satisfecha con las palabras de su chico: “Me alegro de escuchar esto, estoy más tranquila que ayer”, aseguró.
A pesar de que sus palabras convencieron a Tania, Samuel acabó derrumbándose. Javi se levantó a abrazarle y a recordarle que su novia le quería mucho. Después llegó el turno de Sandra Barneda, que le pidió que se acercase hasta donde ella se encontraba y le dijo unas bonitas palabras de apoyo: “Esto va a ser difícil, confía en Tania. A luchar por el amor. ¿Lo vas a hacer?”, le preguntó. Él asintió y ambos se fundieron en un bonito abrazo.
Antes, cuando Sandra Barneda les preguntó a todas las parejas que qué tal habían pasado la primera noche separados, Samuel aseguró que apenas se había relacionado con las chicas y que había estado muy apagado. Sorprendentemente, las solteras negaron esta versión. “Sí que ha estado mal, la echa de menos, pero también ha estado con nosotras”, aseguró Mona.
Samuel y Tania dejaron atrás sus enfados y problemas y se despidieron entre bonitas palabras de amor antes de irse cada uno a su villa.