Con Julián Muñoz ya en prisión, Isabel Pantoja intentaba seguir con su vida, hasta que la policía se presentó en su casa para detenerla. Pepi Valladares, la que fuera amiga inseparable de la tonadillera detalla cómo fue aquella noche.
La policía llegó con una notificación en la que se comunicaba la detención de cantante. Le dieron su tiempo para cambiarse y asearse (porque ya estaba en pijama, Kiko Rivera fuera de casa e Isa Pi acostada) bajo la atenta mirada de una mujer policía, quien estuvo más cerca de Pepi e Isabel, vigiando en todo momento.
“Ella no lloró ni nada, estaba en shock”, es uno de los múltiples detalles que aporta Pepi Valladares en su testimonio. Además, cuenta que esa noche no registraron la casa de la Pantoja, cosa que sí hicieron cuando detuvieron a Julián Muñoz.