Buñol, en la provincia de Valencia, es famosa en todo el mundo por una de sus grandes fiestas, La Tomatina. Y en 'Juegos sin fronteras' hemos querido hacerle un pequeño homenaje a través de esta prueba. Los concursantes en tanda de dos países tenían que conseguir el mayor número de tomates de su color, e intentar que ninguno de los otros tomates se pegaran a su toro. Los tomates del mismo color sumaban un punto y las amarillas lo restan.