La gran pregunta que todos los expertos se hacen después de ocho meses de pandemia, es por qué un virus respiratorio puede llegar a dejar secuelas en el cerebro. Los científicos han llegado a una conclusión: igual que el covid19 se agrava por la inflamación que provoca la tormenta de citoquinas, también el virus puede provocar una inflamación crónica que afecta a la mielina del cerebro.
Como bien lo ha explicado el neurólogo Tomás Segura en Informe Covid, en algunos casos (sin determinar que sean los casos graves, pues también ha ocurrido en leves) el coronavirus ha conseguido traspasar “las barreras protectoras del cerebro”, causando secuelas neurológicas como las que ha descrito María Eugenia Díaz, coordinadora de los pacientes de covid persistente en España.
"Yo antes era muy activa, hacía muchos cursos... Pero ahora noto una gran pérdida de memoria. No puedo leerlo un libro entero, no lo asimilo", ha lamentado esta enfermera, coincidiendo con muchos pacientes que, sin entender lo que les pasaba, han notado una especie de "niebla en la cabeza" que no les permite pensar bien o que, incluso, les ha hecho olvidar cómo se hace una suma o una resta.
De todos los síntomas de los que se quejan los pacientes con covid de largo recorrido: mareos, vértigos, pérdida de la audición, aparición repentina de hematomas, lesiones en la piel ... hay tres, según María Eugenia Díaz, que definen estas secuelas del coronavirus: la pérdida de la memoria, la disnea o falta de capacidad respiratoria o la fatiga crónica pues, como bien apunta la coordinadora, hay expacientes de covid que no se pueden mover hasta el punto de que "no han vuelto a llevar o recoger a sus hijos del colegio".