Desde una ubicación desconocida en Estados Unidos, la Dra. Li-Meng Yan concedía su primera entrevista en una televisión europea a Iker Jiménez. Sus investigaciones sobre lo que sucedió en Wuhan determinan que el SARS-CoV-2 fue creado en un laboratorio y usado como arma biológica. Por ello la viróloga tuvo que huir de China al difundir este mensaje.
"Lo que puedo decir es que solo 4 horas después de mi huida de Hong Kong en secreto el gobierno y el ministerio de seguridad chino se dieron cuenta y organizaron rápidamente a la población de mi ciudad natal. También fueron a mi casa de Hong Kong para buscar a mi familia (...) El gobierno de china reclutó a militares expertos en redes para difundir rumores de que yo era poco más que una cuidadora de hámsters (...) Trataron de arruinarla como si fuera muy poca cosa", le contó al presentador.
No obstante, también le comunicó su intención de seguir difundiendo su verdad a pesar de las consecuencias que pueda tener por ello: "Como médico y científico esto es lo que tengo que hacer. He tomado mi decisión. Sé que no me puedo permitir engañar a la gente. Lo que voy a hacer es difundir el mensaje tanto como pueda y mostrar los hechos para que la gente los verifique antes de que me maten", sentenciaba.