El crimen que conmocionó a Huesca el pasado mes de julio vuelve a ser noticia. Y es que Iván Pardo, el asesino y tío de Naiara, una niña de ocho años, ha descrito ante el juez cómo mató a su sobrina: la sometió a torturas durante siete horas delante de dos de sus primas menores, le dio golpes con el cinturón y descargas eléctricas, esposas... Todo, según él, porque no se sabía la sección.