¿Cuáles son los últimos avances contra el cáncer?
Las nuevas vacunas contra la covid-19 con la técnica de ARN mensajero han abierto nuevas vías para tratar el cáncer
Los avances contra el cáncer pasan por entender su componente genético
María y Paula, dos supervivientes del cáncer "esto es un regalo"
La lucha contra el cáncer tiene la meta puesta en lograr que siete de cada diez enfermos logre sobrevivir a esta enfermedad. Aprovechado la celebración del Día Mundial contra el Cáncer la comunidad científica ha hecho un análisis de los principales avances en el diagnóstico y tratamiento de los tumores para lograr este objetivo.
La Sociedad Americana contra el Cáncer ha resumido las principales líneas en la que los investigadores tratan de explicar el avance de la enfermedad y cómo lograr mejorar el tratamiento de los tumores. En muchos centros de investigación del cáncer, se estudian las causas, el diagnóstico y el tratamiento de esta patología. Los científicos cada vez entienden un poco mejor cómo los cambios en el ADN de una persona pueden provocar que las células normales se tornen cancerosas. Un mejor entendimiento de los cambios genéticos que pueden presentarse en el cáncer ofrece algunos indicios sobre la razón por la que estas células se tornan anormales. Algunos de estos avances pueden conducir a mejores diagnósticos y tratamientos del cáncer de origen primario desconocido.
MÁS
Detectar el origen de los cánceres tumores supone un gran avance en su tratamiento
Resulta importante que los médicos puedan identificar el origen de los tipos de cáncer de origen primario desconocido para que se puedan usar los tratamientos más eficaces. La inmunohistoquímica y otras pruebas de laboratorio pueden ser muy útiles para este propósito, pero estas pruebas aún no pueden indicar donde han comenzado todos los cánceres de origen primario desconocido. Las pruebas de laboratorio nuevas, y otras que actualmente están bajo estudio, ayudarán a clasificar el cáncer de origen primario desconocido con más precisión y ayudarán a predecir el pronóstico del paciente y la respuesta al tratamiento.
Se espera que en algún momento futuro, el número de cánceres de origen primario desconocido se reduzca dramáticamente conforme los médicos puedan hacer pruebas de las muestras tumorales y determinar los tipos de cáncer.
La lucha contra el cáncer pasa identificar los cambios genéticos
Debido a que el cáncer de origen primario desconocido representa un número de diferentes tipos de cáncer, resulta poco probable que un solo tratamiento innovador beneficiará a todas las personas con cáncer de origen primario desconocido. Aun así, los avances en el tratamiento de algunos de los tipos de cáncer más comunes probablemente beneficien también a las personas con cáncer de origen primario desconocido, especialmente si los cánceres pueden ser clasificados con más precisión.
A medida que los investigadores han logran entender los cambios genéticos que causan estos tumores, ellos han podido utilizar nuevos tratamientos que tienen como blanco a estos cambios. Algunos de estos medicamentos más recientes son conocidos como "terapias dirigidas". Estos medicamentos tienen efectos más selectivos en comparación con la quimioterapia. Algunos de éstos, tal como el bevacizumab (Avastin) y el erlotinib (Tarceva) están disponibles para tratar otros cánceres y han mostrado cierta actividad en el cáncer de origen primario desconocido.
Los estudios recientes han descubierto que los cánceres que se originan en cada órgano no son todos los mismos. Estos pueden presentar distintos cambios en sus moléculas más importantes y responder de manera diferente a los tratamientos.
La información detallada sobre los cambios en el ADN y RNA de las células cancerosas empieza a ser valorada por los investigadores como un paso más importante al seleccionar los tratamientos que con más probabilidad ayuden a pacientes individuales.
Principales avances que marcarán la lucha contra el cáncer durante 2023
Recientemente, la revista National Geographic recogía en un artículo cuáles eran los avances más importantes que se esperaban en 2023 en la lucha contra el cáncer. Entre los más importantes cabe destacar el uso de la tecnología de las vacunas ARN mensajero empleada contra la pandemia de covid-19 para desarrollar nuevos fármacos contra los tumores.
Los investigadores de los laboratorios Moderna han demostrado el potencial del ARN mensajero en un ensayo clínico en paciente con melanoma, algo que permitirá iniciar estudios adicionales en otras formas de cáncer con el objetivo de ofrecer a los enfermos tratamientos contra esta enfermedad verdaderamente individualizados.
En este sentido, investigadores del Instituto Fraunhofer de Ingeniería Interfacial y Biotecnología IGB (Alemania) han conseguido modificar genéticamente el virus del herpes simple tipo 1, que provoca el doloroso herpes labial, de tal manera que en el futuro podrá utilizarse en la lucha contra el cáncer.
Los virus tienen una estructura sencilla: constan de una pequeña cantidad de material genético envuelto en proteínas y lípidos. Con un tamaño de entre 20 y 200 nanómetros, sólo pueden detectarse con un microscopio electrónico.
Sin embargo, su capacidad para secuestrar células vivas y explotarlas para su multiplicación es lo que hace únicos a los virus. A menudo destruyen sus células huésped en el proceso, y es entonces cuando los animales y los seres humanos enferman.
Otro de los avances en la lucha contra el cáncer son las terapias con células T CAR que mantienen a las personas libre de tumor durante una década. Se trata de una nueva técnica de edición génética más sofisticada que no daña el ADN.
La edición de bases, diseñada con técnicas de CRISPR-Cas9, permite utilizar linfocitos T de un donante (CAR-T alogénico) en pacientes con leucemias y linfomas hasta ahora incurables, evitando que el sistema inmunitario del paciente receptor los ataque.
Investigaciones recientes en en Estados Unidos han permitido descubrir que cada tipo tumor tiene una presencia concreta de microorganismos, ya sean virus, bacteriófagos y protozoos, además de bacterias y hongos por lo que los científicos podrían ahora utilizar el microbioma para detectar y controlar el cáncer con mayor antelación, diagnosticar casos delicados y desarrollar terapias que manipulen el microbioma para eliminar el cáncer por completo o, al menos, hacerlo más susceptible a los tratamientos existentes.