Menopausia, cáncer de mama y alcohol: qué provoca un mayor riesgo a partir de los 40

Sobre el cáncer siempre hay noticias: la mala es que aumentarán los casos, y la buena, que más gente va a sobrevivir a esta grave enfermedad gracias al avance de los medicamentos. La mejor, que el cáncer se puede evitar o al menos, la posibilidad de sufrir uno. Emilia Gómez Pardo, doctora en Bioquímica y Biología molecular y máster en Nutrición y Salud es una optimista del cáncer y cree que, aunque el riesgo cero de sufrir de cáncer no existe, sí hay cosas que desterrar definitivamente de nuestras vidas. La especialista es rotunda sobre la menopausia: no provoca cáncer de mama. Otra cosa es que ocho de cada diez cánceres de mama se produzcan en edad postmenopáusica.

Según la experta, "la menopausia no provoca cáncer por sí misma, pero en esta etapa confluyen factores que favorecen el riesgo de padecerlo. Uno de ellos es la edad. La menopausia ocurre en un intervalo entre los 45 y los 60 años, y justamente entre 50 y 65 es el pico mayor de cáncer. "

"La mayoría de los cánceres de mama es postmenopáusico, hasta el 80%, pero es por la edad, sobre todo, porque en esta etapa de la vida las mujeres hacen menos actividad física y por una cuestión hormonal se gana peso, se disminuye la masa muscular y al tener menos músculos esas calorías se transforman en grasa."

La especialista de la Fundación CRIS contra el cáncer es rotunda al señalar que se puede prevenir el 40% de los casos de los tumores de mama si pudiéramos tener un estilo de vida y unos hábitos que alejen el fantasma de la enfermedad. Pero no nos equivoquemos, la lucha contra el cáncer en nuestro día a día no comienza a los 40 años, sino que es una batalla que hay que librar a lo largo de nuestras vidas.

Emilia Gómez Pardo explica a Informativos Telecinco las dificultades que plantea la prevención, "la asignatura pendiente", por no ser "fácil de trabajar" y que tiene que ver con la sensación humana de pensar que no me va a tocar a mí.

Contra eso es difícil luchar, porque "es inherente a la condición humana sentirse invulnerable y nos cuesta mucho entender que lo que hacemos hoy y lo que hacemos mañana tiene un impacto en nuestra salud, aunque los datos son muy contundentes y la ciencia lo dice claramente, que el cáncer de mama se puede prevenir hasta en un 40% cuando se integran todos los factores que podemos controlar, son cifras muy importantes".

Pero si esta en nuestras manos. ¿por qué hay cada vez más casos de cáncer?. ¿Cuáles son estos factores que ignoramos? La realidad es que "el estilo de vida occidental que no ayuda".

"Estamos en un momento en que todo es propicio para el desarrollo del cáncer, pero hay muchas cosas que podemos hacer para reducirlo. ¿Cómo es nuestro estilo de vida? Malcomemos, maldormimos, no nos movemos, tenemos estrés. Todos esos son componentes que cada uno de una manera independiente y cada uno de forma conjunta favorecen la aparición de cáncer". Un ejemplo, "el sobrepeso y la obesidad están relacionados con al menos 12 tipos de cánceres, de los más prevalentes". El aumento de la longevidad es otro factor de riesgo, y más en la sociedad occidente donde la vida se alarga.

Emilia Gomez Pardo deja claro que tener cáncer no es el destino de todos, como a veces parecen decirnos los datos. "El cáncer es una enfermedad muy compleja, es multifactorial. Se tienen que sumar muchos factores, como son la edad la genética, el estilo de vida, factores ambientales y luego todos estos se combinan de una forma azarosa para desarrollar o no un cáncer. Esto que llamamos azar tiene una parte de desconocimiento. cada vez se descubren más mutaciones que tienen que ver con el desarrollo de un cáncer, pero si estoy fuera así el 100% de las personas nos moriríamos de cáncer y no es así.", argumenta Emilia Gómez Pardo.

A pesar del escándalo y las sacudidas de la industria cuando se dice que el alcohol provoca cáncer, Emilia Gómez Pardo lo dice claramente. "Hay una asociación directa entre el alcohol y desarrollo de un cáncer de mama, sobre todo postmenopáusico, que es el mayoritario.

"El alcohol es un comportamiento de riesgo y no un hábito de vida. El alcohol es de los factores que están en nuestras manos modificar y que más impacto tiene en el cáncer de mama. La Formación mundial para la investigación del cáncer de mama lo dice muy claro: "no hay un consumo de alcohol seguro cuando hablamos de cáncer de mama. Entonces, lo mejor es no consumir alcohol. Y si consumes, reduce mucho la cantidad porque se ha visto que hay una relación con una bebida alcohólica al día: una cerveza al día tiene impacto en el desarrollo de un cáncer de mama postmenopaúsico."

Hay gente descreída del cáncer, que señalan a su abuelo o a algún conocido, que fumó y bebió toda la vida y murió a los 90 años de viejo. Y en el otro extremo, vegetarianos que mueren de cáncer sin explicación alguna, después de una vida aparentemente sana.

"El cáncer es una enfermedad de largo recorrido" y una persona pudo ser saludable en una cierta etapa de su vida, "pero no sabemos qué ha pasado antes". Además. estamos ante "una enfermedad "multifactorial" y con "un componente que llamamos azar, que está fuera de nuestro control. Por eso es tan importante la investigación, porque este componente hay que hacerlo más pequeño y transformarlo en conocimiento".