Aunque Javier haya sido uno de los afortunados en ganar los 120.000 euros de la Lotería de Navidad, su vida sigue un tanto igual: abre el bar como cada mañana y espera a la jubilación, como cualquier otro. Por otro lado, Tarragona, Ávila y Zamora, celebran por primera vez los premios del sorteo. Sea cual sea la circunstancia, el sentimiento posterior a haber ganado la lotería es de celebración.