Los ciudadanos de Shanghái se rebelan contra el confinamiento y el sacrificio de mascotas
Los ciudadanos de Shanghái gritan desde sus casas por las noches contra el confinamiento
Varios habitantes han grabado las incautaciones de mascotas para sacrificarlas por los contagios de coronavirus
Estados Unidos ha pedido no ir a China
Los habitantes de Shanghái continúan con sus protestas contra las medidas para el coronavirus impuestas por China, como el sacrificio de mascotas. Lo que comenzó como un descontento se ha transformado en una rebelión paulatina de una ciudad con 26 millones de habitantes. Los gritos desde las casas y las manifestaciones en las calles se han convertido en algo habitual.
El Gobierno chino anunció como algo temporal el confinamiento, el más grande de una ciudad desde el comienzo de la pandemia. La estrategia inicial pasaba por un cierre que partió la metrópoli en dos. La zona al este del río Huangpu quedó confinada desde el 29 de marzo al 1 de abril. Ese día pasó a la zona oeste, hasta el 5 de abril. Sin embargo, las autoridades comunicaron una extensión "indefinida".
MÁS
Las restricciones se han endurecido día tras día, tras comprobar que los brotes se convirtieron en transmisión comunitaria. Primero fueron los recordatorios mediante personas y robots de no salir de casa. Después se aplicaron los cierres con vallas que rodeaban los edificios. Una de las últimas ha sido el sacrificio de las mascotas de personas contagiadas con la covid-19.
Manifestaciones contra las restricciones frente al coronavirus
Los ciudadanos han grabado las incautaciones de mascotas. En algunas ocasiones, las autoridades han metido a los animales en bolsas para después llevarlos al sacrificio.
Los gritos encienden las noches de la ciudad financiera. Algunas personas han terminado arrestadas por negarse a cumplir con las restricciones. Otras han saqueado supermercados ante la falta de comida por las compras de pánico.
10 vídeos
Estados Unidos pide no entrar al país asiático
El Departamento de Estado estadounidense ha recomendado a sus ciudadanos no viajar a China. La razón que han aludido es la "aplicación arbitraria" de las restricciones. Por su parte, el gigante asiático ha mostrado su rechazo a tal justificación, que ha calificado de "acusación infundada".
"Expresamos una fuerte insatisfacción y una firme oposición a la acusación infundada de la parte estadounidense sobre la política de prevención de epidemias de China", ha explicado el portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Zhao Lijian.