Corea del Norte prohíbe los vaqueros, los piercing y los cortes occidentales porque son "símbolos del Capitalismo"

Corea del Norte quiere evitar la influencia del modo de vida occidental en el país. Por ello tiene una lista de prohibiciones más larga que esta pandemia de covid: desde los vaqueros, los piercings, los cortes de pelo raritos hasta otros hábitos que recuerden al Capitalismo .

Según medios norcoreanos la norma gubernamental también incluye hablar o escribir como lo haría un surcoreano, importar material prohibido desde Seúl, con duros castigos para los que no respeten las órdenes de líder Kim Jong-un.

Corea del Norte ha expresado en reiteradas ocasiones su preocupación por la tendencia de los jóvenes del país en adoptar con cada vez más frecuencia la moda occidental. A finales de mayo, Rodong Sinmun, el periódico oficial del país publicó un artículo para mostrar su preocupación por los jóvenes norcoreanos que siguen las tendencias de la moda occidental. "Debemos tener cuidado con el más mínimo signo del estilo de vida capitalista y luchar para deshacernos de ellos", advertían desde el medio.

Así, que entre las prohibiciones, además de los vaqueros agujereados o demasiado ajustados, se incluye una lista con una docena de cortes de pelo prohibidos y peinados, que no están autorizados, como el pelo de punta o teñido de colores.

Para atajar a los descarriados, la Liga de la Juventud Patriótica, deben actuar como una "policía de la moda" para vigilar que nadie vista "ropa que parezca extranjera" ni se corte el pelo, como el enemigo capitalista.

Al líder norcoreano Kim Jong- un tampoco le gusta que sus ciudadanos tengan mascotas, porque eso expresa la decadencia de occidente. Así que ¡¡fuera perros y gatos!!

El pasado verano, algunos medios británicos publicaron que el Gobierno de Corea del Norte estaba confiscando perros entre la élite de Pyongang para enviarlos a zoológicos estatales o venderlos a restaurantes.

Para el Ejecutivo totalitario las mascotas son un síntoma de la "decadencia capitalista" y son más útiles para hacer frente a la escasez de alimentos en el país. Pero esa medida no es la más surrealista. En Corea del norte está en vigor la prohibición del sarcasmo, sobre todo cuando se habla del Gobierno.

Los ciudadanos no pueden realizar comentarios sarcásticos sobre Kim Jong-Un o su régimen en sus conversaciones cotidianas, pero tampoco ver series extranjeras, no autorizadas o en la que se critiquen al máximo líder.