Ruili, una localidad con más de 200.000 residentes en la provincia suroccidental china de Yunnan, informó de dos nuevas infecciones por covid-19. Se trata de dos ciudadanos de Myanmar que cruzaron ilegalmente la frontera terrestre. Por ello, las autoridades chinas han decidido bloquear el paso con la antigua Birmania y declarar que están de nuevo en 'modo de guerra' frente al virus.

Todos los residentes de la ciudad serán examinados para detectar el coronavirus mientras las autoridades se comprometen a tomar medidas enérgicas contra el notorio tráfico de contrabando transfronterizo de la zona. Ruili prohíbe a sus habitantes salir de la localidad excepto por "circunstancias especiales" y ha ordenado a la población que se aísle durante al menos una semana.

Se han cerrado negocios y escuelas, mientras que los puestos de control y los trabajadores de la salud están ubicados en complejos residenciales para verificar las identificaciones y temperaturas de las personas.

Xie Dapeng, alcalde de Ruili, anunció los dos casos confirmados durante rueda de prensa. Una mujer birmana de 32 años llevó a sus tres hijos y dos niñeras al otro lado de la frontera de Muse, Myanmar, a Ruili el 3 de septiembre, y se quedó en la residencia de su hermana en la comunidad de Aoxing Shiji. La mujer y una de sus niñeras dieron positivo por covid-19.

Todas las personas que vivían en el complejo residencial donde se alojaban las pacientes se sometieron a pruebas de ácido nucleico que resultaron negativas. Un total de 190 contactos cercanos también han sido monitorizados y se encuentran en cuarentena, según los funcionarios.

La ciudad de Ruili está separada por un río poco profundo de la ciudad fronteriza de Muse, la principal puerta de entrada de Myanmar a China y está inundada de armas y dinero en efectivo de los casinos, las drogas y el sexo. Los funcionarios locales admitieron que todavía existen lagunas en el control de los 169,8 kilómetros de la frontera que Ruili comparte con Myanmar.

Las autoridades chinas también dijeron que ayudarán al Gobierno de Myanmar con esfuerzos antivirus y apoyo financiero para ayudar a las aldeas fronterizas con el país a construir fuertes puntos de control de prevención y control de epidemias.

Myanmar ha experimentado un aumento en los nuevos casos de coronavirus. El pasado viernes, el país volvió a imponer duras medidas para controlar la propagación de la enfermedad. China parece haber contenido en gran medida el brote del virus, ya que el país ha pasado un mes sin nuevos casos de infección doméstica.

El estado de ánimo optimista en Beijing se produce a medida que aumentan las preocupaciones sobre un resurgimiento del covid en toda Europa.