La tensión y el precio del petróleo se disparan tras los ataques a dos petroleros en el golfo de Omán
La tensión se dispara coincidiendo con el primer aniversario de la ruptura del acuerdo nuclear con Irán por parte de EEUU
Arabia Saudí acusa a Irán de los ataques y esta lo niega
Fuego en el golfo de Omán. Literalmente. Dos buques petroleros fueron evacuados este jueves tras sufrir supuestos ataques. El grupo de Operaciones Marítimas Comerciales de Reino Unido (UKMTO), que forma parte de la Royal Navy, dio la voz de alarma al informar de que se había producido un "incidente" en el golfo de Omán, cerca de la costa iraní. Arabia Saudí tardó poco en acusar a Irán, aumentando la tensión en Oriente Medio. Irán negó tener nada que ver con el incidente.
La tensión se ha vuelto a disparar en la región coincidiendo con el primer aniversario de la ruptura del acuerdo nuclear con Irán por parte de Estados Unidos, amenazando la seguridad de navegación en el estrecho de Ormuz, una de las rutas mercantes más importantes del mundo, puesto que comunica el golfo Pérsico con el océano Índico. Las consecuencias fueron inmediatas en los mercados.
El precio del crudo se revalorizaba en las primeras horas de este jueves casi un 5% respecto del cierre de ayer a raíz de los incidentes reportados en el golfo de Omán, donde han sido evacuados dos buques petroleros tras sufrir supuestos ataques, provocando que el barril de petróleo Brent superase los 62 dólares.
"Reino Unido y sus socios están investigando lo ocurrido", ha indicado UKMTO en un breve mensaje y la Armada de los EEUU tuvo que asistir a los buques. Los barcos afectados son el Front Altair, con bandera de las Islas Marshall y operado por la naviera noruega Frontline para la petrolera taiwanesa CPC, y el Kokuka Courageous, con bandera de Panamá y propiedad de una empresa japonesa. El primero de los barcos se dirigía de Qatar a Taiwán y ha registrado un incendio a bordo cuando se encontraba a 25 millas del puerto iraní de Jask. El segundo petrolero navegaba desde un puerto saudí hacia Singapur cuando ha sufrido un incendio a unas 28 millas de Jask.
El grupo de Operaciones Marítimas Comerciales de Reino Unido (UKMTO), que forma parte de la Royal Navy, daba la voz de alarma al informar de que se había producido un "incidente" en el golfo de Omán, cerca de la costa iraní. Era más grave de lo que nadie podía imaginar.
El diario especializado en temas navieros Tradewinds publicada que el Front Altair había sido alcanzado por un torpedo cuando navegaba frente a las costas del emirato de Fujairá. La petrolera taiwanesa lo confirmaba. Un portavoz de Frontline subrayaba al diario noruego VG que el Front Altair, que llevaba 75.000 toneladas de nafta, se habían incendiado. Sus 23 tripulantes fueron evacuados a un barco cercano.
El Kokuka Courageous, operado por la empresa de Singapur BSM, sufrió ataques por lo que los 21 tripulantes tuvieron que ser evacuados, según informaba un portavoz de BSM. "El Kokuka Courageous sigue en la zona y no hay peligro de que se hunda",confesaba el portavoz de BSM, afirmando que "el cargamento de metanol está intacto". El presidente de la naviera japones Kokuka Sangyo, Yutaka Katada destacaba que el barco ha sido alcanzado en dos ocasiones en un lapso de tres horas antes de que toda la tripulación fuera evacuada. El primero de los ataques se produjo hacia las 6.00 horas.
Por su parte, el portavoz de su departamento, Abbas Musavi, ha expresado la "preocupación" del Gobierno iraní. "Irán expresa su preocupación por el sospechoso incidente de hoy sufrido por un petrolero vinculado con Japón, que se produjo de forma simultánea al encuentro entre el primer ministro japonés y el líder de la Revolución Islámica", ha señalado en su Twitter. Teherán "contempla lo sucedido en contraste con las orientaciones y esfuerzos regionales y entre regiones para reducir las tensiones en la región", ha añadido Musavi.