Asun, madre de Nagore Laffage que hace diez años murió asesinada en San Fermín por un homicida por negarse a ser violada por su agresor. Con dureza, Asun ha recordado que ese hombre jamás le pidió perdón más allá de hacerlo como estrategia durante el juicio. Con seguridad y dolor ha asegurado que, si pudiese volver atrás, le diría a su hija que no se negase con tal de salir con vida.