Cristina quiere conocer a su padre

Scott aterriza en España para jugar en Vitoria. Conoce a Magdalena, Scott insiste en mantener una relación con ella, pero Magdalena no quiere. Al final salen juntos, ella se enamora (...) Después, el jugador ficha por un equipo griego, al poco tiempo, Magdalena descubre que está embarazada y se pone en contacto con él pero no recibe la respuesta. Scott se desentiende y le confiesa que tiene una hija que acaba de nacer en Estados Unidos. Nace Cristina y su abuela es la que se ocupa de cuidarla. Su madre no tiene dinero. Magdalena intenta que el jugador reconozca a la niña. Ella le envía fotos del bebé para que al menos le ponga cara a su hija. También intenta que le ayude a mantenerla pero se desentiende. El jugador se marcha en 1994 definitivamente.