En 1997, Pedro Munster conoce a Mario Vaquerizo, que le realiza una entrevista sobre la movida. Conectan enseguida pero tras la entrevista no vuelven a verse hasta que en 1999, Alaska, amiga de Pedro desde los años 80, le llama y le presenta a su novio: Mario Vaquerizo. Pedro no tarda en reconocerle. Los tres amigos pasan una etapa maravillosa y Pedro y Mario se hacen grandes amigos. Pedro le considera un hermano que le apoya en los peores momentos de su vida.