No han pasado ni cinco minutos desde que Antonio David abandonara el salón destrozado cuando Mila Ximénez ha salido corriendo a pedirle perdón. Él es su mayor apoyo dentro de la casa: “Escúchame, yo confió en ti y en dos más… he estado muy desafortunada, me puedes perdonar… perdóname que he metido la pata, perdóname por favor te lo pido, que sé por lo que estás pasando… perdóname que a veces soy muy cerda”.
Mila estaba destrozada y ni el perdón de Antonio David le ha servido de consuelo. Ambos estaban abrazados y llorando desconsolados en el jardín, cuando Jorge Javier Vázquez les ha pedido que entraran en el búnker para intentar entender qué estaba pasando. “Tengo los nervios al límite porque le he pedido perdón, me falta la ropa, la higiene, me siento fatal y lo he pagado con él… Yo estuve con él hace poco y sé cómo está, me lo ha contado… No podemos más, de verdad”, aseguraba una Mila destrozada y al límite al mismo tiempo, que Antonio David seguía sin poder ni gritar para liberar el dolor que estaba sintiendo.