Joao y Alberto disfrutaban de su reencuentro después de la expulsión del vidente, cuando apareció de nuevo en la sala de expulsión Pol. “No sé qué decir… esto es cosa mía. Estoy alucinando”, comentaba Joao mientras Alberto y Pol no articulaban palabra.
“Me voy a morder la lengua”, decía Pol sin querer decir nada de lo que sabía de Alberto aunque no tardó mucho en confesar. “Este chico ha salido en todos los programas, en revistas, le ha faltado ir a los informativos”, aseveraba Pol enfrentándose a Alberto ante la mirada atónita de Joao que intentaba defender a su pareja.