La relación de Miriam y Mónica nos tiene totalmente desconcertados. Tras su ‘hora del té’ y su posterior conversación, en el jardín y a solas, durante la fiesta, las archienemigas parecen estar más cerca que nunca de una posible reconciliación... Miriam no se despega de Mónica, literalmente, tanto que hasta le ha pedido ¡dormir juntas!