Estela Grande se abre en canal en la curva de la vida de ‘GH VIP 7’ y cuenta cómo ha sido su relación con Diego Matamoros, llena de subidas y bajadas. La concursante habla del momento en el que sufrió un aborto y se emociona al hablar del episodio más duro en la vida de su marido: "Pasa de tener una niña a enfrentarse a que no tiene nada de eso".
Además, Estela dedica unas palabras a Kiko Matamoros y aborda el conflicto de Diego con su hermana Laura: “Los adora a los dos”.
Estela ha empezado hablado de una infancia "muy feliz" y de una adolescencia donde, una niña con estudios, se apasiona por la moda y empieza a hacer sus primeros trabajos sobre la pasarela. La concursante también se ha recordado de su primer novio, con quien reconoce que no se portó bien, y la culpa que eso le ocasionó durante años: “Lo dejé con este chico y ahí empezaron todos mis miedos, mi inestabilidad emocional y mis inseguridades. Me porté muy mal con él, cuando era un persona que me quería y me respetaba, pero yo no tanto. Me he sentido toda la vida responsable de portarme mal con este chico”.
A los 20 años, Estela se va a vivir a Londres aunque suele regresar a España cada poco para ver a su familia. En uno de estos viajes exprés, conoce a Diego en Madrid y, como ella misma dice, el “destino” quiere que se vuelvan a ver por segunda vez: “Conocer a Diego marcó un cambio radical en mi vida. Pasé de tener una vida normal a enfrentarme a situaciones que nunca hubiera imaginado”.
Estela reconoce que su relación ha estado llena de “subidas y bajadas” y que no conseguían una buena estabilidad: “Cuanto estábamos bien, estábamos muy bien, y cuando estábamos mal, estábamos muy mal”. Ella explica que se enamoró perdidamente de Diego, pero que él todavía estaba amarrado a su vida anterior: “Estábamos en puntos diferentes. Diego estaba anclado en una situación sentimental de la que no había salido y yo sufrí mucho”.
Por eso, Diego decidió cortar con ella y, a día de hoy, es algo que Estela agradece: “Me estaba volviendo loca, no era yo. No era la chica feliz y risueña que soy, no quería ni ir a trabajar. Él decidió romper con la relación para que yo pudiera seguir con mi vida. Yo estaba fatal, metida en la cama todo el día”. Fue entonces cuando sus amigas le regalaron un viaje a Cádiz y allí recibió la llamada que lo cambiaría todo: “Fue el principio de lo mejor que tengo y de una tortura que hemos pasado. Un infierno”.
Estela se refiere al episodio más doloroso de la vida de Diego, cuando se enteró que su hija no era biologicamente suya: "Él se tiene que enfrentar a su nueva vida donde ha tenido que pasar de una vida muy plena con una niña, a tener que enfrentarse a que no tiene nada de eso. Es muy duro y él lo ha pasado muy mal. Han sido momentos muy difíciles y le ha costado mucho salir. Y a mí me ha costado seguir ahí, apoyarle y sacarle de ahí”.
La modelo también ha confesado que es una persona “muy insegura” y que sufrió un aborto que le hizo coger miedos: “Cuando pasaron los días me di cuenta de que, a lo mejor, podría tener problemas en un futuro. Para mí nunca ha sido importante ser madre, no he tenido ese instinto maternal, pero con Diego lo tengo clarísimo. Quiero ser madre con él”.
Además, la concursante ha reconocido que Diego pasó momentos familiares muy duros y que, a raíz del distanciamiento con los suyos, cogió “inseguridades”: “Se encontraba mal y, en consecuencia, yo con él”.
Eso sí, Estela ha dejado claro que Diego “adora” a su padre y a su hermana, Laura Matamoros, con quien también ha tenido roces: “La relación va por rachas pero los sentimientos no. Diego estaría mintiendo si dejara las cosas pasar e hiciera como si nada. Él ha sufrido mucho pero también su familia”.
La concursante ha contado que su relación actual con Kiko Matamoros es nula y que nunca han tenido mucho trato: “He tenido muy poca relación con él. Los tres momentos puntuales en los que he estado con él siempre ha sido muy respetuoso y muy amable. No tengo ningún problema, pero si veo a mi pareja sufrir por culpa de una persona, yo voy a tener un poco de rechazo hacia él. Pero me encantaría que se acercasen”.