Laura se puso hecha una furia cuando Anup les contó que Chari y Marta se habían estado riendo de él por haber compartido la comida y haber cocinado para 'los felices'. Algunos compañero se sumaron en defensa del indio, que últimamente parace que se ha establecido de nuevo donde el sol más calienta, es decir, con la mayoría. "Vamos a liarla", dice. "Yo la lío, yo la lío", apoyaba Jhota. "Es la persona más hipócrita de esta casa", apostilló Terry refiriéndose a cualquiera de los dos.
El propio hindú trató de calmar a sus recién estrenados amigos, quizás viendo la que se había liado con su comentario, y para quitarle hierro al asunto admitió que se lo estaban pasando bien. Pero hace falta muy poco para que los felices crucifiquen a los tristes. "Eso es de ser mala, y de vacilar a las personas, que es lo que han estado haciendo con Anup. Que lo han utilizado", rugía Laura.
Cuando Marta y Chari aparecieron por allí no podían dar crédito al aquelarre que se había estado gestando a sus espaladas, sobre todo cuando las preguntaron, circunspectos, si se habían reído de Anup. "Si lo habéis hecho sóis muy malas personas", advertía la sindicalista como un disco rayado. Ellas se arrepintieron de haber asomado la cabeza por el salón y negaron tajantemente tales acusaciones. El interrogatorio se prolongó innecesariamente varios minutos más, a instancias de Terry, Jhota y Laura que seguían metiendo cizaña para que sus enemigas declaradas no se fueran de rositas. Ni una palabra más alta que otra, eso sí, pero las miradas hablaban a gritos...
Después, en el jardín, mientras el triunvirato seguía malmetiendo, Anup les premiaba con unos cigarros de cortesía. También Chari y Marta comentaban la jugada con Yago en la suite. "Si yo saltara...", suspiraba Chari. "No les debes nada. Ni ellos a ti. Ni lealtad ni nada. Así que olvídate de ellos", aconsejaba Marta, al tiempo que Yago les rogaba que dejaran de darle vueltas al tema.