Yago continúa ingeniándoselas para que Lydia siga prendada de él mientras que dure su estancia en la casa. Esta vez se ha ayudado del depillo de dientes de ésta para metérselo en la entrepierna y tratar de que la rubia lo coja sin su ayuda. Por su parte, la mallorquina ha hecho un amago de intentar coger el cepillo, después de hacerse la remolona pero la actitud insistente del gallego ha hecho que ésta se animará a hacerlo.
Ya conocemos muy bien los tonteos entre ambos y está claro que la pareja más juguetona de esta edición no dejará de sosprendernos. La única duda que nos queda es si finalmente ocurrirá algo que haga saltar la chispa definitiva para que se entreguen a la pasión. Por el momento, seguiremos viendo intentonas de seducción y flirteo entre estos dos grandes hermanos.