Desde que falleció su madre el año pasado, Yessica vive con su hermana mayor y sus sobrinos. La valenciana ama su trabajo de monitora porque le ayuda a olvidar los problemas diarios y le llena profesionalmente. Además asegura que es muy sentimental y sensible, por eso odia las injusticias y las mentiras. En estos momentos no tiene pareja.