Nada más llegar a Gran Hermano, el programa ha obligado a Eva, la novia de Danny, a adoptar una identidad falsa. Hasta el final de la gala la joven no pudo ser ella misma ni hablarle con libertad a su chico, pero les concedió unos minutos a solas en el confesionario. Algo que, por cierto, no le pasó desapercibido a los compañeros.
En cuanto se quedaron solos, Eva le puso los puntos sobre las íes a su pareja: “Tenemos que hablar porque me has hecho mucho daño”. Para ella, las atenciones de Danny con Susana no tenían nada de fraternal: “Te he visto agarrándola así, como sólo me tocas mí”. “Susana es una niña de puta madre y ya verás como, desde dentro, lo vas a ver distinto”, ha intentado excusarse el dj. Eva coincide en que Susana es maravillosa. Para ella, su chico es el único responsable: “Si yo no digo que sea mala niña. Ella no tiene la culpa, la culpa la tienes tú, que le tenías que haber dicho 'eh, que yo tengo novia'”
Asegura que lo ha pasado muy mal, que ha perdido peso de los celos (o los cuernos) que ha soportado, y ha querido saber porqué su novio se encamaba con otra delante de toda España. “Peque, cuando ella se metió, me levanté, me vine al confesionario y le dije que no me sentaba bien que se metiera en mi cama”, se ha excusado el dj, aunque las imágenes hablan por sí solas.
Sea como sea, las últimas noticias de la vida en directo nos dan a entender que el tirón de orejas no ha pasado de ahí y Eva ha quedado conforme con las respuestas. Eso o al menos parece dispuesta a hacer borrón y cuenta nueva con su chico mientras dure su experiencia en GH.