Miguel echa de menos a Pol, mucho, desde que Adara explotó al enterarse de lo ocurrido en el apartamento: "Seguramente necesite un tiempo", le ha intentado calmar Noelia.
"No entiendo que del piso nos fuimos y había una foto de los dos. Yo la puse en mi cabecero y luego cuando nos fuimos la puse en el corcho. Él me dijo pero llévatela... y me la llevé", recordó con corazones en los ojos.
"Me dijo que no iba a pasar nada, que nada iba a cambiar entre nosotros. Salgo de p... m... pero llego y Adara me monta el pollo. Desde ahí ya no existo para él.", ha narrado sin quitarse las gafas de sol y en susurros.
Además, ha asegurado que ahora "se besan delante suya, lo hacen más y se dicen mucho te quiero".Todo, según Miguel, en su cara para que él lo vea.
"Yo di todo por él, si había un trocito de pan se lo guardaba"
No da crédito a la reacción de Pol, no solo por la promesa de que nada iba a cambiar sino por todo lo que él ha dado por él: "Tú sabes cómo ha sido mi amistad con él. Si había un trozo de pan se lo guardaba para él. Le doblaba la ropa. Yo entiendo que lleve un camino diferente al mío... pero no me hagas esto porque a mi me destrozas"