Rebeca, madre de Aritz: "No sé quién es su persona especial"
A tan solo siete días de la gran final de 'GH 16', Aritz ha entrado al confesionario y se ha quedado muy serio cuando ha recuperado su cartera y su móvil, y el Súper le ha preguntado que a quién le gustaría llamar por teléfono. El concursante ha tenido claro que a estas alturas del concurso no quería llamar a nadie y que cuando saliera de la casa ya hablaría con quién tuviera que hablar. El Súper ha insistido, explicándole que era solo una suposición porque no iba a poder llamar a nadie, pero él se ha mantenido en su postura.
Aunque Aritz ha tenido claro que no quería llamar a nadie, Jordi González ha aprovechado para hablar con Rebeca, la madre del concursante. "Es un chico reservado, no le gusta enseñar sus sentimientos. Él está siendo como es y a la familia y a los amigos, no nos está sorprendiendo nada", ha asegurado la madre de Aritz sobre el paso de su hijo por el concurso. Además, ha dejado claro que a ellos les está encantado el concurso de Artiz: "La familia y los amigos estamos muy orgullosos de él, y para los que los conocemos está siendo él y no nos sorprende nada". Jordi ha querido saber que le decían las personas de su alrededor y Rebeca le ha explicado que la gente le está apoyando al cien por cien y que aunque, a algunos les pueda sorprender un poco saben que está viviendo una historia en un lugar determinado: "Yo le conozco, es cariño, es sincero y lo que no ha sido en su vida es ser falso". El presentador no podía despedir a la madre de Aritz sin preguntarle por su persona especial: "Está clarísimo que cuando el entorno no habla es porque no conocemos a la persona especial, quien se lo quiera creer bien y quien no también. Si está empezando una relación o lleva poco tiempo, pues es normal que no nos haya dicho nada".
Mientras tanto en la casa de Guadalix...
Aritz no tiene palabras para describir la felicidad que siente por haber llegado a la final de 'GH 16' y sobre todo, por hacerlo en compañía de Han, la persona a la que más cariño tiene en la casa. Ha aprendido a mostrar cariño, pero tiene claro que ese lado tan emocional no lo quiere enseñar en la calle porque eran cosas que él tenía muy controladas y que es consciente, de que en la casa se le ha ido de las manos. Espera que su paso por la casa no le pase factura fuera de la casa, pero tiene claro que todo lo que ha hecho lo ha hecho porque le ha dado la gana y que esta vida solo se vive una vez. Lo único que puede sentir es si ha hecho daño a alguien.
A pesar, de que su relación sentimental con Han va en constante aumento y no paran de darse besos y de jugar bajo el edredón, Aritz tiene clarísimo que la relación que tiene fuera no va a cambiar porque su persona especial, es lo mejor que le ha pasado en la vida. Bajo ningún concepto quiere engañar a Han y no para de decírselo: "Esto disfrutando del momento". Sin embargo, parece que Han sigue insistiendo en que Aritz siente más por él de lo que le dice aunque, él no para de decirle que es un teatrero.
La pareja del año ha pintado algo más que un graffiti esta semana y eso tiene a Niedziela y a Sofía muy desconcertadas. No entienden que a falta de tan pocos días para la final, Aritz haya tenido un sospechoso acercamiento con Han y sobre todo que el edredón que comparten no pare de subir y bajar de una forma tan sospechosa.
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A Sofía no le gusta el cambio de actitud de Aritz ha tenido con Han y tiene la sensación de que tiene a su amigo completamente manipulada. Está empeñada en que Aritz no es de fiar y que está utilizando a Han para ganar el concurso. Han tiene la sensación de que se está poniendo muy pesada y que tiene razón Aritz cuando le dice que Sofía se ha convertido en la nueva reina del 'piqui-piqui'.
El juego de la verdad que los finalistas tenían para celebrar sus tres meses de convivencia ha terminado con la pareja del año discutiendo como un matrimonio en el confesionario. A Han no le ha hecho ninguna gracia saber que Aritz ya no estaba dispuesto a venirse a vivir a Madrid y se ha vuelto a sentir engañado. Aritz le ha vuelto a decir que él nunca le había negado la existencia de su persona especial y han comenzado a discutir como en sus mejores tiempos. Pero tras la discusión, Aritz ha mirado la carita de Han, se ha olvidado de todo y se han vuelto a esconder bajo el edredón para darlo todo. Pero por si fuera poco, tras su reconciliación en la cama, los jóvenes se han metido en la ducha y han invitado a quién los estuviera mirando a unirse a su particular ducha.
