Noemí, Ariadna y Daniel están con un pie fuera de Guadalix de la Sierra. Los tres concursantes nominados se han mostrado muy afectados por tener que vivir, semana tras semana, el ritual y los nervios de la expulsión. "Siempre salimos los mismos", se quejaba Dani.
Ariadna, por su parte, estaba muy triste al saber que una gran parte de sus compañeros le habían dado sus puntos cuando en realidad cree que se lleva muy bien con todos y Noemí se lamentaba de que uno de ellos tuviera que dar por finalizada la experiencia, aunque eso sí, tranquilizó a sus compañeros asegurando que, "esta vez me voy yo, ya me toca".
Mientras hacían cábas de quiénes les habían "endosado" los puntos, cada uno de los tres nominados daba sus argumentaciones sobre por qué iba a ser cada uno el expulsado. Según Ari, sería ella "porque ya me han salvado muchas veces"; Dani creía que su pelea con Hugo podría ponerlo de patitas en la calle, pero era Noemí la que más claro lo tenía:
"Chicos, podéis estar tranquilos, esta vez me voy yo, ya me toca. Además, la gente quiere mucho a María y yo tengo movidas con ella, así que me van a echar a mí por eso". Ari y Dani intentaron tranquilizar a la surfera comentándole que sus "movidas" tampoco han sido tan grandes, pero la canaria seguía firme en su pensamiento: "La gente la quiere a ella, la han vuelto a meter aquí, yo me voy, lo sé".