Azucena, Ariadna y Noemí eran las tres concursantes nominadas de la semana. En un primer momento las tres tuvieron que abandonar la casa y despedirse de sus compañeros para dirigirse a la zona de nominaciones hasta conocer quien se salvaba.
Mercedes Milá, después de conocer la opinión de público y ex concursantes, comunicaba a las nominadas quien se salvaba. Noemí, muy criticada por sus compañeras durante la semana, fue la elegida. Por su parte, como en la gala anterior, una furgoneta irrumpía en la sala de nominaciones para ‘secuestrar’ a Azucena y Ariadna y llevarlas a plató.
Azucena y Ariadna esperaban en la sala incomunicada mientras visionaban las imágenes de sus compañeros en la casa. Mercedes Milá las 'visitaba' en la sala incomunicada y mostraba la razones que habían dado sus compañeros para nominarlas. Las votaciones todavía estaban abiertas y tenían la posibilidad de defenderse.
Ari se esperaba sus nominaciones, no le pillaron por sorpresa… no así a Azucena: "Sabía que Michael me había nominado pero me ha dolido mucho, ha sido una puñalada. Llevo dos días bien pero creo que la casa me viene grande".
Después de repasar algún vídeo más y derramar alguna que otra lágrima, Mercedes anunciaba que Azucena era la expulsada. Las dos concursantes, llorando a mares, se fundieron en un abrazo. Una volvía a casa, otra bajaba a plató para ‘enfrentarse’ de nuevo a la presentadora.
"Ari y Joy son de lo mejor que me he encontrado en la casa. Para mi son las ganadoras del concurso", aseguraba a Azucena a Mercedes nada más llegar a plató después de la despedida con Ariadna.
Milá le dio a conocer el porcentaje con el que había sido expulsada, un 71%: "Ese dato no me preocupa, yo no quería ser la primera expulsada. Soy consciente de que no me he integrado".
"No te puedes extrañar por que la gente ha hecho lo que tú pediste", aseguraba la presentadora. "Claro, he estado dos semanas pidiendo que me echasen…", asintió Azucena. La concursante también aceptó que había fallado a sus compañeros y a si misma en la prueba semanal.
También reconoció que las formas utilizadas con alguno de sus compañeros no habían sido las adecuadas. "En mi forma de hablar soy muy bruta y muy borde", admitía Azucena. "Tienes que aprender a controlarte esas formas sobre todo con personas que no conoces", le aconsejaba su hermana.
Pero no todo fueron malas noticias para Azucena. La concursante recibió una muy buena noticia… su novio, que estaba en plató, había encontrado trabajo. "¡¡Pues haber cunado nos independizamos!!", concluía entre risas.