La 'relación de amistad' entre Michael y Ariadna se estrecha por minutos. Los dos concursantes, que desde el primer día se compenetraron muy bien, pasan cada vez más tiempo a solas, dedicándose caricias y hasta compartiendo cama. Lo cierto es que sus gestos de cariño son tan numerosos que su relación ha comenzado a ser muy especial, sobretodo para Ari, que reconoce abiertamente sentir algo especial por su compañero.
Ariadna y Michael han compartido una larga conversación en la cama donde la joven le ha contado a su compañero el significado de uno de sus tatuajes. "Llevo una princesa besando a un sapo porque yo también he besado a muchos y no he encontrado a mi media naranja", le decía la joven poniéndole ojitos de cordero degollado. El policía de Hueva, muy cariñoso con su amiga, no quiso dejar de acariciarle el brazo durante toda la tarde.
Los dos concursantes se dedicaron un amplio número de caricias y de gestos de cariños, y Michael quiso dejarle claro a Ari que "es su gran apoyo dentro de la casa". "Me gusta mucho estar contigo, a ver si no me abandonas", le decía el policía mirándole a los ojos.
Ariadna, encantada con la situación, no se lo pensó dos veces a la hora de pedirle a su compañero que duerman una noche juntos. "Me prometiste que si no me ibam dormiríamos una noche juntos", le recordaba Ari a su compañero que evito darle una respuesta concisa. Pero el policía decidió cumplir los deseos de cu compañera, que voluntariamente se ofreció a acostarle pronto para poder compartir colchón con él, y el domingo por la noche los dos 'amigos' durmieron en la misma cama.
Parece que Ariadna está preocupada por el daño que le pueda hacer su compañero. A la joven le gusta Michael, pero cree que él no siente lo mismo por ella. "Creo que Michael no piensa como yo y me da miedo engancharme demasiado a él y poder pasarlo mal", aseguraba la joven en el confesionario de la casa de Guadalix de la Sierra.