La de este lunes era la primera gala de 'Gran Hermano catorce' en plató de Sonia, que por nada del mundo imaginaba volver a ver a Kris tan pronto, y menos entre las paredes de la casa de Guadalix de la Sierra. Sin embargo, su contraprestación pendiente era un arma de doble filo: podría abrazarle de nuevo, pero a cambio de acabar con su cabellera.