Una de las cosas que más miedo le daba a la ya exconcursante de GH era precisamente la opinión que tendría su familia tras su paso por el concurso, y si seguirían estando ahí después de su comportamiento. Para su sorpresa, ha tenido muy buena acogida por su parte, y aunque aún no ha podido ir a su casa por temas de trabajo, afirma que está todo bien con ellos.