Chari, en reunión de urgencia con el súper, decidió sacrificarse y quedarse en Gran Hermano una semana más, porque su familia necesitaba el dinero. Cuatro días después de , su mentalidad ha cambiado mucho. Ya no tiene tanta prisa por marcharse. "Una parte de mí no se quiere ir", asegura. La andaluza, que esta semana junto a Anup y Yago, quiere demostrarle a la audiencia que tiene muchos valores positivos y que "no es tan mala". aquella noche fatídica está nominada
Chari por fin sonríe. Sigue sin hablarse con el núcleo duro de 'los felices', pero ahora se ha hecho inseparable de Marta, su principal apoyo en la casa sin Rubén. No tan a menudo también se junta con Dámaso, Patricia o Yago.
Su optimismo es extensivo a su relación de pareja. Así, mientras si la perdonará tras ver los famosos revolcones con 'el Feroz', la muchacha opina que todo esto servirá para que la relación se haga más fuerte: "Después de esta experiencia, ¿qué nos queda por vivir?... Sé que la relación va a salir fortalecida de todo esto". Rubén duda
Aunque no oculta su preocupación por cómo habrá reaccionado su hombre ante los vídeos, la exuberante rubia piensa que Rubén va a hablar bien de ella y le va "a echar un cable desde fuera". Un cable al cuello a este paso, ya que el comercial está siendo muy crítico con su todavía novia en todos los platós. Sin ir más lejos, confesó "Mi corazón me dice que siga con Chari, pero mi cabeza me dice que no". este domingo en el debate