La tensión estalla como nunca entre Lucía y Silvia: "¡Estoy harta de ti, tienes que madurar!"
Una manicura ha sido el detonante de la tensión entre las mellizas
Lucía le recriminaba el resultado de una uña a Silvia y esta terminaba negándose a continuar con la manicura
Jorge no se corta con Lucía y Silvia en directo: “No me gustó que me tratarais como a un muñeco”
Lucía y Silvia, desde que entrasen a 'Gran Hermano' han sido un gran apoyo la una para la otra, pero una manicura ha hecho que tengan en los últimos días su momento más tenso desde que están en la casa de Guadalix.
Silvia se ofrecía a hacerle las uñas a su hermana, pero el resultado no le gustaba nada a Lucía: "Esta me la has hecho fatal". "No, fatal no. Se ha quedado así, ¿qué quieres que te diga? es el producto que tú tienes", reaccionaba Silvia. "Encima de que se las hace te dice que las haces fatal", apuntaba Javier que estaba presente en este momento en el baño.
MÁS
Las 'caras largas' de la casa ante la salvación de Vanessa: "Si la gente se posiciona detrás de ella es que no la quieren"
Las madres de Luis y Nerea apuestan por la separación de sus hijos: "Es una relación que no va a ningún lado"
Maica, entre lágrimas tras una gran discusión con Adrián por haberle llamado "cucaracho": "El numerito era innecesario"
Y Lucía quería dejar claro que estaba convencida de que era su hermana la que "no se lo había aplicado bien". Algo que terminaba con la paciencia de su hermana: "Pues te lo aplicas tú porque, como lo hago mal, yo no te lo voy a hacer".
Siendo esta decisión de Silvia de no querer continuar haciendo las uñas a su hermana la que detonaba todo. "Vete a tomar por c*, la máquina no la vas a tocar más que es mí, sabía yo que iba a pasar esto, la niñata de los c*".
"Si te quejas encima de que estoy dedicando mi tiempo para hacertelo...", decía Silvia, pero Lucía mostraba su enfado con esto: "Que te largues de aquí, estoy harta de ti, tienes que madurar. Llevo aguantándote toda la mañana y tú ahora me dices que no me las vas a hacer".
Silvia, ante las palabras de su hermana, le dejaba completamente claro que "no es su obligación" hacerle las uñas, pero esto tampoco le servía a Lucía para calmarse: "Tampoco es mi obligación estar aquí todo el día aguantándote".
Todo esto pasaba en el baño, ante la atenta mirada de una Vanessa que no daba crédito con lo que estaba viendo y que no decía ni una palabra ante la tensión que se respiraba entre las mellizas en este momento.