Pol G. tiene 16 años. No es la primera vez que se presenta a un talent, pero no tiene un recuerdo muy positivo del anterior: los nervios le traicionaron e interrumpió su actuación a la mitad. Esta vez no ha pasado. Es más, ha cantado dos veces. Fue Risto quien se lo propuso: “Me dan mucha rabia este tipo de actuaciones. Con esa voz debería haberse caído el teatro, pero te han dado el aplauso de rigor”. Por eso quiso darle una segunda oportunidad: “Vas a volver a cantar y con Risto al lado, mirándote. Quiero que me zarandees”. Él lo hizo, dejó a un lado todos sus miedos y acabó logrando el pleno de síes.