El truco de la abuela: qué pasa cuando echas un poco de canela al empanar el pollo

  • La canela puede ser un gran aliado para conseguir intensificar los sabores

  • Lo ideal es añadirla en polvo al huevo batido en el que se van a bañar los filetes, no al pan rallado

  • No va a aportar un gran sabor a canela, pero le da un toque diferente por el que seguramente te van a preguntar

El empanado es una de las técnicas de cocina más típicas a la hora de freír alimentos. No es otra cosa que cubrir el ingrediente que vayamos a usar con pan rallado para después freír en aceite. El resultado de esta técnica es una textura crujiente por fuera y jugosa en su interior, y con ella protegemos las propiedades organolépticas del alimento del proceso de fritura. Este tipo de rebozado es ideal para empanar carnes y pescados porque es fino y aporta el crujiente justo para que, aunado con la carne y pescado, no se pierda sabor, sino todo lo contrario, se complementan a la perfección. 

Con el objetivo de que el empanado tenga más consistencia podemos añadir un proceso de rebozado en harina entre el huevo y el pan rallado. Y si además queremos que adquiera volumen, se puede incorporar un poco de levadura en el huevo batido.

Variaciones como el empanado a la milanesa, con queso parmesano, ajo y perejil en el pan rallado; o a la inglesa, añadiendo aceite, leche o cerveza y mostaza al huevo, aportan un extra de sabor y texturas diferentes. Para un toque creativo y textura adicional, se puede mezclar el pan rallado con frutos secos triturados, como almendras, nueces o cacahuetes. Esta combinación aporta matices de sabor diferentes y un crujido extra en a tus platos.

Con canela: el truco de la abuela

Pero si alguien que entiende de empanados diferentes esa es Julia Chaves, conocida en redes sociales como @soylayayajulia en Instagram (25,7 mil seguidores), quien ha venido a bien compartir un truco para empanar o rebozar pechugas o filetes de pollo. 

El pollo rebozado es una receta estrella tanto para niños como para mayores, es imposible resistirse a un filete recién hecho de pollo empanado. "Tiene un truquillo que no es invento mío y como yo lo sé, lo sabrá mucha gente más, pero hay gente que no lo sabe", explica Julia en su vídeo. 

Aunque empanar un filete no tiene mucha ciencia, lo cierto es que siempre hay trucos. Se le echa sal a la carne, se pasa por harina, huevo y finalmente por pan rallado. Sin embargo, a Julia Chaves le gusta añadir canela en polvo al huevo batido en el que se van a meter los filetes para darles un sabor diferente. "Tiene un sabor que dices, ¿a qué sabe que está tan bueno? No sabe a canela, pero tiene algo que no sabes qué es…", asegura la cocinera.

Un truco la mar de sencillo, que no requiere de tiempo extra ni de un esfuerzo mayor, las pechugas se rebozan con normalidad y se cocinan en la sartén como si nada. "La canela es canela molida, cuando echas el huevo para batirlo, bates el huevo con la canela dentro y luego te lo comes y dices: 'qué bueno está, ¿qué tiene?'. Porque no notas el sabor a canela, pero tiene un sabor especial", asegura Julia.

Filetes empanados con canela paso a paso

  1. El corte de carne más adecuado: se recomienda usar cortes finos y con carne de ternera, pollo o cerdo, como solomillo, lomo o pechuga. Este tipo de filete se hace rápidamente, lo que ayuda a evitar que el empanado se queme antes de que la carne esté lista.
  2. Sazonar: Es necesario sazonar la carne antes de empanarla. Se puede usar una mezcla de especias o simplemente sal y pimienta al gusto. Esto ayuda a agregar sabor a la carne y asegura que no quede sosa.
  3. Seca la carne: Hay que asegurarse de que la carne este limpia y seca, pues si no lo está el empanado no se fijará correctamente. 
  4. Prepara el empanado: Pon en un plato la harina, en otro el huevo batido con la canela en polvo y en otro el pan rallado. 
  5. Empana la carne: Pasa cada filete por harina, asegurándote de que esté completamente cubierto. Luego, sumerge cada filete en el huevo batido con la canela y que quede completamente cubierto. Finalmente, cubre cada filete con el pan rallado, asegurándote de que esté uniformemente cubierto por todas partes. Presiona con las manos para que se adhiera bien.
  6. Fríe la carne correctamente: Calienta el aceite en una sartén grande a fuego medio-alto. Asegúrate de que haya suficiente aceite para cubrir la mitad de los filetes cuando los coloques en la sartén. No sobrecargues la sartén, ya que esto puede hacer que la temperatura del aceite baje y los filetes empanados no se doren correctamente.
  7. Ojo a la temperatura del aceite: La temperatura del aceite es importante para obtener filetes empanados perfectos. Si el aceite está demasiado caliente, el empanado se quemará antes de que la carne esté lista. Si el aceite no está lo suficientemente caliente, no se dorará adecuadamente.

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