Las desafortunadas palabras de Ágatha Ruiz de la Prada sobre cómo viven los gitanos haciendo una comparativa al caso que tiene ella ahora mismo de su mudanza y situación de caos siguen trayendo cola. Poco le ha importado a Aguasantas el perdón de la diseñadora a través de un comunicado. La exconcursante de 'GH VIP' ha querido manifestar públicamente su indignación y en reprochar ese comentario y a todos los que han salido en su defensa con el paso de las horas.

"Estoy viviendo como las gitanas, no tengo de nada, ni luces, ni cocina, ni lavabo, ni sofá. Estoy en mi casa vieja, pero completamente desmantelada", indicaba la diseñadora y a raíz de esto cargaban en contra suya voces como la de Lolita Flores, Pitingo o Noemí Salazar, entre otros. A estas se ha unido ahora la de Aguasantas, que no contenta con la rectificación y perdón de Ágatha Ruiz de la Prada, ha explicado lo mal que le han hecho sentir estas palabras con tintes racistas y que se justifiquen como una "inocente frase hecha".

Pese a que Ágatha ha acabado pidiendo disculpas y destacaba que su intención no era "ofender al pueblo gitano", la influencer sí que se ha visto dañada y lo ha dejado claro a través de un comunicado en sus stories de Instagram. "No me importa el perdón de Ágatha Ruiz de la Prada. Gracias a ese comentario me he dado cuenta de lo que sois la mayoría hoy en día", ha manifestado.

Lo que más le ha molestado a la ex de Juan José Peña son las justificaciones que ha leído en relación a este desafortunado comentario. "He podido ver comentarios de miles y miles de payos diciendo que son frases hechas y que se suele a decir a día de hoy. Y no les culpo de verdad. "Después de todo lo que mis abuelos pasaron y seguimos pasando nosotros con la mayoría, tengo también frases hechas y son muchísimo peor que no tener cocina, ni luz".

La influencer ha querido recalcar los episodios tan duros que a lo largo del tiempo han vivido los gitanos como la "Gran Redada o el exterminio de gitanos que se hizo en España en 1749" como para utilizar frases hechas que les vulneren más, aunque la intención de Ágatha Ruiz de la Prada no fuera ofender al pueblo gitano.