María de Mora, la mujer que nos ha dejado para siempre este viernes, fue durante años uno de los rostros más habituales de los platós de Telecinco, a los que acudía para hablar de las cenas que organizaba entre empresarios y famosas.
En ellos, siempre hacía gala de su fuerte personalidad y presumía de una sonrisa que no se borraba de su cara ni en los momentos más difíciles. Prueba de ello fue cuando acudió al programa ‘Sábado Deluxe’ para hablar de su enfermedad.
Aunque estaba atravesando uno de los momentos más complicados de su vida, la socialité se mostró de lo más optimista y dio una lección de fortaleza ante la audiencia y los colaboradores del popular programa de la cadena amiga. Lo recordamos.
Hace diez años, la mujer que ha perdido la vida este viernes se sentó en el programa de las noches de Telecinco para hablar de la enfermedad que padecía: un cáncer que se había alojado en la pleura.
Una noticia que fue para ella como un jarro de agua fría, pero que no le hizo perder las ganas de luchar: “Estoy superando esta enfermedad con muchísimas ganas, con mis familiares y amigos y con mi hijo, que no se ha separado en ningún momento de mi lado”, declaró en aquella entrevista en la que habló por primera vez de su estado de salud.
Hay que decir que aquel cáncer no era el primero al que se había enfrentado en su vida, ya que, años atrás, había batallado contra uno de mama a los 36 años y una recidiva a los 38: “Ahora, tengo el mismo cáncer, el de mama, una recidiva con metástasis que se me ha instalado en la pleura”, dijo de su tercera recaída en 2014.
Pese a la fortaleza y la sonrisa con la que afrontaba su guerra contra la enfermedad, no pudo evitar derrumbarse en algún momento durante su entrevista y, sobre todo, las lágrimas afloraban cuando hablaba de su hijo, quien era su mayor apoyo.
"Mi hijo lo ha dejado todo, se ha vuelto de Nueva York, donde vivía, y ahora está a mi lado. Él es como mi esqueleto hoy en día. Me sostiene totalmente, es mi alma, mis ojos, es mi me mente, es todo”, dijo, visiblemente emocionada, ante las cámaras de Telecinco.
En aquella entrevista, María de Mora habló por primera vez de los tres cánceres a los que se había enfrentado a lo largo de su vida y la actitud que había adoptado: “En un primer momento, lo afronté con miedo (..) Pero no te puedes quedar en una cama, tienes que elegir la vida (..) Hay que tirar para adelante y ser feliz”, declaró.
Con este mensaje de fortaleza y optimismo queremos recordar a la mujer que supo mantenerse en pie en los momentos más complicados de su vida y batallar contra todas las dificultades con su mejor arma, la sonrisa. Hasta siempre, María.