Sonia Ferrer ha sido una de las invitadas de excepción en la boda de Antonio Rossi y Hugo Fuertes, que se daban el 'sí quiero' ayer por la tarde en una ceremonia con más de 200 invitados y rodeados por sus seres queridos.

Ferrer, que llegaba acompañada por su pareja, Sergio Fontecha, eligió para la ocasión un vestido malva, largo y con escote que la convirtió en una de las más elegantes de la velada. Y es que ella no podía faltar en uno de los días más importantes para su íntimo amigo, al que conoce desde hace años gracias a la televisión y que les unió para siempre.

Justo por eso, la televisiva ha querido dedicarle unas emotivas palabras a Antonio Rossi en uno de los días más especiales de su vida. "Sabe cuánto le quiero, pero nunca sabrá lo feliz que me hace verle así de enamorado", ha escrito junto a una preciosa imagen de la entrada de los novios.

Una boda, que ellos mismos dieron a entender que no iba a ser nada tradicional, ya que habían preparados muchas sorpresas y querían que sus invitados tuvieran una experiencia bastante dinámica, con un cóctel basado en nada menos que 16 platos.

"Nadie se va a sentar, es una boda cóctel con distintas estaciones de comida. Aunque habrá mesas y sillas, la idea es que sea más dinámica", explicaba Rossi.

Además, parece ser que tanto el colaborador televisivo como su marido optaron por poner sus detalles favoritos, desde las ostras, a la tarta. "Habrá arroz asiático, quesos, jamón que me he ido a Salamanca a buscarlo y todo", aseguraba.

Justo hace ya dos años, Sonia Ferrer también pasaba por el altar con Sergio Fontecha, ocasión en la que Antonio Rossi ocupó un papel muy especial. Esta era la segunda vez que Sonia se vestía de novia, ya que la primera vez fue hace más de 15 años cuando contrajo matrimonio con Marco Vricella, el padre de su hija.

En aquel momento, Rossi dejaba muy claro que Ferrer era "como su hermana" y dejaba entrever lo unidos que están tras tantos años de amistad. "Es mi hermana y soy testigo en una boda muy íntima que no llega a cien personas", confesaba muy emocionado.

Y, precisamente, también le preguntaban al colaborador televisivo si a él le haría ilusión casarse, un sueño que justo acaba de cumplir junto a Hugo Fuertes. Desde mariachis, a fuegos artificiales, chupitos y música hasta altas horas de la madrugada, han acompañado a la feliz pareja y a sus invitados en un día lleno de emociones.

De hecho, otros compañeros como Adriana Dorronsoro han dejado muy claro que Rossi estaba muy nervioso. "Lleva un mes a mi lado en el programa y le digo: '¡relájate!'", contaba a los reporteros.

"Estaba muy nervioso, y seguro que hay lágrimas porque tiene un discurso muy bonito preparado para Hugo. Seguro que llora un poquito. Se quieren mucho y seguro que se va a romper... ¡Y mira que es difícil verle llorar!", apuntaba al respecto de la gran cantidad de emociones que les han acompañado durante uno de los enlaces del verano.