Jaqui Lin es la joven cristiana que ha dejado boquiabiertos a todos los miembros del jurado de ‘Factor X’ con su melodiosa voz y que los ha conquistado con unas canciones de lo más pegadizas que han sido compuestas por ella.

Para muchos, esta joven concursante es una desconocida, pero hay otros tantos que la recordarán por su participación en un conocido reality show de Cuatro. Fue en 2016 cuando tuvo su primera experiencia televisiva.

Retrocedemos al pasado para recordar cómo fue la primera vez que se puso delante de las cámaras y cuál fue el concurso de telerrealidad en el que la vimos participar junto a su hermana, una mítica de ‘Supervivientes’.

Corría el año 2016 cuando Jaqui Lin y su hermana, Janet Capdevilla, sintieron la llamada de Dios y se lanzaron a la aventura de participar en ‘Quiero ser monja’, un reality show que Cuatro emitió ese mismo año.

Las dos hermanas querían un cambio de vida y decidieron que meterse durante seis semanas en un convento era la mejor opción de hacerlo: “Tengo muchas ganas, quiero romper con todo y empezar algo nuevo”, declaró la ahora concursante de ‘Factor X’.

Durante el mes y medio que duró la experiencia, la mujer que ha conquistado a Abraham Mateo, Guillermo Bárcenas, Lali y Vanesa Martín estuvo viviendo en tres conventos diferentes, donde conoció a unas monjas que las cuidaron como si fueran sus hijas.

Además, gracias a ‘Quiero ser monja’, Jaqui Lin tuvo la oportunidad de viajar a Bolivia para ejercer de misionera junto al resto de las participantes. Una experiencia que fue muy enriquecedora para ella.

Pasadas las seis semanas, las participantes del reality show de Cuatro tenían que decidir si se decantaban por llevar una vida religiosa o, por el contrario, preferían volver a su ciudad y recuperar sus costumbres y su día a día.

En el caso de Jaqui Lin y Janet Capdevilla, ambas optaron por recuperar sus vidas y no ingresar en un convento. Aún así, se llevaron grandes aprendizajes del programa que cambiaron por completo su forma de pensar.

“Ahora mismo me noto con mucha más tranquilidad, me ha entrado mucha luz, se ha limpiado una parte de mí. Me noto con mucha paz”, dijo, entre lágrimas, la que ahora concursa en ‘Factor X’.

“Necesito volver a lo mismo de antes, pero sin dejar atrás lo que hemos sentido porque hay que transmitirlo y continuar proclamándolo”, aseguró la joven al terminar la experiencia. Una promesa que parece haber cumplido, ya que, años después, continúa divulgando su fe en televisión, eso sí, ahora, mediante la música.