Mucho físico en el centro del campo, calidad arriba y orden táctico. Son las tres premisas del combinado de Laurent Blanc. Eso, y muchas posibilidades tácticas para afrontar los cuartos de final ante España.
Francia pasa a cuartos como segunda de grupo con cuatro puntos, una victoria (frente a Ucrania), un empate (contra Inglaterra) y una derrota (Suecia), tres goles en contra y tres goles a favor. Pese a esta última derrota, los franceses desplegaron un gran potencial frente a Inglaterra y sobre todo frente a Ucrania.
El tridente atacante
En la selección francesa destaca, sobre todo, su tridente atacante, Benzema, Ribery y Nasri, por los que pasan la mayor parte de las ocasiones lusas. Benzema y Ribery no han mostrado aún su mejor nivel en esta Eurocopa lo que hace temer que frente a España, siendo ya una eliminatoria, no van a fallar. Nasri marcó el gol del empate frente a Inglaterra demostrando que también es imprescindible en el ataque francés.
El gran peligro de Francia vendrá por las bandas. Jordi Alba y Arbeloa sufrirán mucho ante la velocidad y el desborde de Nasri y Ribéry y también con las incorporaciones de los laterales Clichy y Debuchy.
Benzemá caerá mucho al medio, buscando la incorporación de algún mediocentro y, de paso, descolocar a Ramos y a Piqué. El delantero ya ha demostrado además que no sólo sabe meter goles también darlos. Frente a Ucrania dio los dos pases de gol.
En el centro del campo Diarra es indiscutible. Junto a él, varias posibilidades con Ben Arfa, M’Vila, Cabaye y Menez. Combinando la fuerza, la calidad y la llegada.
La línea más floja del combinado de Blanc es la defensa. El seleccionador, además, no contará con Mexes que frente a Suecia recibió la segunda amarilla. Koscielny o Reveillere jugará junto al valencianista Rami.