Tras recibir una paliza brutal, Irene está muy abatida. Su abuelo cree que la mejor solución en este momento es que se vuelva a vivir con sus padres (algo que la llevará de cabeza a un internado). Ella solo quiere estar con Nelson.
Un día descubre que su abuela guarda una cantidad importante de dinero en la caja fuerte. Y quiere fugarse con su novio. Ahora solo necesita quedarse sola en el piso y abrir la caja fuerte.
Su abuelo le deja cinco minutos en la casa, mientras baja la maleta, Irene sabe que es la única oportunidad que va a tener de coger el dinero y largarse del barrio de una vez.